Once festines para auténticos buitres

EL Periódico

09/03/2009 PEDRO CABECERA

El Ejecutivo regional y propietarios particulares de fincas han habilitado diez de los once muladares anunciados hace un año. A estas aves se les facilitan animales muertos.


En los tiempos que corren cada vez son más las personas que tienen dificultades para hacer siquiera tres comidas al día. La crisis hace más costosa la cesta de la compra. Sin embargo, hay verdaderos buitres que saben aprovechar las oportunidades. Y más, si se lo ponen como se las ponían al generalísimo. Extremadura da de comer a las colonias de buitres que habitan en la región. Son los denominados muladares o comederos de buitres que están repartidos por once parajes de la comunidad autónoma. Estos lugares hechos para que estas aves se den auténticos festines se anunciaron hace justo un año y ya haya diez en marcha (solo falta uno ubicado en el Parque Nacional de Monfragüe).
Se trata de evitar la carencia de alimentos que sufren las aves necrófagas, especialmente las especies de buitres, desde que entraron en vigor las restricciones comunitarias sobre los restos de los animales que mueren en el campo. Estos comederos están en aquellos lugares donde se registran las mayores colonias de buitre negro, una especie se encuentra en peligro de extinción y es una de las que el Gobierno regional pretende proteger con esta medida.
En la región habitan un total de 850 parejas de buitre negro, según la Junta, que representan aproximadamente el 45% de la población total de esta especie en Europa. Además, se benefician de estos muladares otras especies que han sufrido carencia de alimentos, como el alimoche, el águila imperial, el águila real y los córvidos.
Los muladares están ubicados en las zonas de Granadilla, el Parque Nacional de Monfragüe, Acehúche, las sierras de San Pedro y Gata, y la reserva del Cíjara. En la Sierra de Gata, en la localidad de Descargamaría, comen en una finca de la organización ecologista Adenex, desde donde explican que "funciona muy bien y los buitres comen con total tranquilidad".
Asimismo, tres de ellos están en fincas de titularidad pública y son atendidos por la empresa pública Tragseca, mientras que los ocho restantes son muladares de explotación, instalados en explotaciones particulares y atendidos por sus titulares.

Qué comen
Cada uno de ellos tiene una hectárea o menos y están ubicados preferentemente en laderas con ligera inclinación, para facilitar así el despegue de las aves. En la parte superior tienen un voladizo para evitar la escalada de animales carnívoros domésticos o salvajes, y el cerramiento está rodeado en su perímetro por una base de cemento para impedir que hagan galerías.
Pero qué comen estas aves. La legislación sanitaria establece que, independientemente del tipo de comedero del que se trate, para que el ganado de una explotación pueda ser destinado a su consumo por las aves necrófagas, en el caso del ganado ovino y caprino de más de 18 meses, el 4% de los animales muertos de la explotación deben obtener resultado negativo en la prueba de encefalopatía espongiforme bovina (enfermedad de las vacas locas).
Además, pueden comer reses de vacuno de menos de 24 meses, ovino y caprino menor de 18 meses, cerdos, caballos, concejos y especies cinegéticas de caza mayor.
Pese a que tanto la Junta como Adenex aseguran que los muladares están en marcha, la Sociedad Zoológica de Extremadura los echa en falta, y ha presentado uno para el Parque Nacional de Monfragüe.