Europa decide salvar a los buitres ibéricos

Bruselas, 24/04/2009 - BirdLife International acogió hoy con satisfacción en Estrasburgo la votación del Parlamento Europeo donde se han aprobado las enmiendas elaboradas por SEO/BirdLife que abren la posibilidad de volver a dejar restos animales disponibles para la alimentación de las aves necrófagas silvestres.

La aprobación en 2002 del Reglamento Europeo que regula la gestión de subproductos animales no destinados al consumo, como consecuencia de la lucha contra el mal de las vacas locas, obligó a los estados miembros a cambiar la gestión ganadera teniendo que recoger todos los restos animales del campo sin que éstos pudieran servir para alimentar a las especies necrófagas, como había estado ocurriendo hasta entonces.

El trabajo en conjunto de todos los sectores implicados, la posición de BirdLife y el acuerdo alcanzado por la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo, que han cooperado de manera constructiva, han encontrado una solución para encontrar las medidas que aseguren la conservación de las especies necrófagas, algunas de ellas en peligro de extinción, como el quebrantahuesos.

La votación de hoy en el Parlamento Europeo permitirá que los ganaderos de los Estados miembros puedan volver a dejar el ganado muerto en el campo que quedará, siempre bajo las medidas sanitarias necesarias, disponible para la alimentación de las especies necrófagas. Ana Iñigo, responsable de Especies Amenazadas de SEO/BirdLife, comentó que "BirdLife lleva tiempo solicitando decisiones para eliminar esta amenaza innecesaria para algunas de las especies más emblemáticas de Europa, como son las aves rapaces, y estamos especialmente contentos de que varios diputados del Parlamento Europeo, así como funcionarios de la Comisión hayan tomado en serio nuestra petición y trabajado a fondo de manera constructiva hasta la decisión de hoy”.

En España las poblaciones de buitre leonado (Gyps fulvus) se han visto particularmente afectadas por la falta de disponibilidad de alimento en la naturaleza. Grupos de ésta especie se han visto a cientos de kilómetros de sus lugares de nidificación, como en Alemania y Bulgaria, ante el asombro de los lugareños, en busca de alimento. También han generado alarma entre los ganaderos al haberse sucedido casos dramáticos pero excepcionales de ataques a ovejas parturientas. Además, ésta falta de disponibilidad de alimento afecta también a especies amenazadas como el águila imperial ibérica (Aquila adalberti), el buitre negro (Aegypius monachus) y el alimoche (Neophron percnopterus).

Ana Iñigo, apunta no obstante que “este un importante avance, pero ahora le toca a los Estados Miembros poner en práctica el Reglamento, trasponiendo a nuestra legislación las excepciones que se han aprobado hoy. En nuestro caso gran parte de la tarea recae en las comunidades autónomas”.